Como cada viernes a medianoche
Mientras buscas en brazos perdidos mi aliento, yo sigo soñando contigo, besando labios ajenos y rogando que seas tú.
Ámame en silencio, con sigilio cada vez que doblas la esquina y le das la espalda al viento para verme, ocultándonos de la gente y del amor.
Huyamos de todo esto, del viento, de la extraños. Vámonos donde nadie nos conozca, donde ya no haya más miedo ni más dolor.
Te hechizaré cada viernes en la noche, cuando la luna aparezca y tu cuerpo se incendie del mio. Necesitarás más que unos besos largos y una piel para amarme. Te hundirás conmigo como un maldito hechizo antes que amanezca, antes de encontrar la cordura.
Me fumaré un cigarro en honor a tu nombre y repitrás conmigo las veces que me amaste hasta que el humo nos borre del recuerdo, del tiempo.
¿ Te escaparías conmigo?
Antes que amanezca, antes que nos encuentren y nos obliguen a odiarnos. Recogeré mi maleta y mi alma para escapar tan lejos que baile en el sol.
Escápate conmigo antes que me pierda entre la gente, antes que me pierda en el silencio. Antes que te olvides del sol y huyas escondiéndote de la nostalgia. Escapémonos antes que se den cuenta que cada viernes necesito más de ti.